(20 DE MAYO, 2024) Por J. Jesús Esquivel.
Miedo
Washington – Son ya varias ocasiones que colegas reporteros estadunidenses me preguntan que si en México la gente tiene miedo de que Donald Trump pueda ser electo nuevamente presidente de los Estados Unidos. Mi respuesta a los interesados ha sido otra pregunta: “¿Ustedes tienen miedo de que Trump regrese a la Casa Blanca?”. Varios, por lo menos cuatro, me han contestado que sí.
Más que miedo, me parece que en México la sociedad está pendiente, primero, de saber si los estadunidenses pueden cometer otra vez el error de llevar a la presidencia al ególatra y racista de Trump.
Segundo, los mexicanos que pueden tener miedo a esta posibilidad latente en Estados Unidos son los que llevan décadas contribuyendo al desarrollo económico, social y cultural de esa nación, pero que continúan viviendo bajo un estatus laboral y de residencia de indocumentados.
Y tercero, debemos conocer en detalle qué planes tiene Claudia Sheinbaum para contrarrestar a las amenazas y advertencias de Trump, si este energúmeno le gana a Joe Biden las elecciones del 5 de noviembre.
No son exabruptos de un político ignorante y hambriento de poder las promesas que hace Trump a sus seguidores racistas y conservadores. Tal vez no lance misiles a puntos específicos del territorio mexicano para, según él, acabar con los cárteles del narcotráfico como fanfarronea. De lo que hay más posibilidad, es de que ordene a la Guardia Nacional, al Pentágono y a la Patrulla Fronteriza endurecer y doblar la vigilancia de la frontera con México. No hay duda de que si es otra vez presidente, Trump llevará a cabo las redadas masivas para ubicar, detener y deportar a inmigrantes indocumentados y en especial a los mexicanos.
Ya lo hizo una vez y sin titubear lo volverá a hacer; doblegar a México para que le haga el trabajo sucio en materia migratoria por medio del amedrentamiento de imponer tarifas arancelarias de hasta el 100% a las exportaciones mexicanas que se consumen al norte del Bravo.
Para enfrentar a un ignorante con poder y deseos imperialistas no hay que tener miedo. Hay que ser más cabrón que bonito, como claman mis padrinos, los hijos del Averno, cuando el Chamuco los manda a recoger almas impías e hipócritas.
Claro, hay que esperar a que los comicios presidenciales de gringolandia se definan. No obstante, Sheinbaum debe contar desde ya con un plan B en caso de que la estupidez se imponga sobre la decencia en los sufragios de nuestros vecinos del norte.
Miedo tienen millones de estadunidenses frente a la sombra naranja del millonario racista que amenaza con dividir todavía más a su país. Por igual, millones de inmigrantes indocumentados que corren el riesgo de ser divididos y separados de sus descendientes que ya nacieron en Estados Unidos.
Claudia tiene que estar preparada y no quemar sus naves antes de tiempo ni mucho menos definir como amigo a Trump, quien es sin duda el enemigo más desalmado que ha tenido México y los mexicanos en los últimos años. ¡Que el Chamuco nos agarre en el pecado!